Las labores de restauración y mantenimiento de nuestro Patrimonio pueden verse facilitadas con el uso de drones. A “vista de pájaro” conseguimos una vista de los edificios y lugares históricos.
Con esta perspectiva general y detallada podemos evaluar la actuación, anticipándonos al lugar en el que se encuentran los posibles puntos de interés con el fin de agilizar y economizar los trabajos. Dando un paso más, y a partir de la modelización del estado actual, podemos simular lo que en otro momento existió con una perspectiva global de todo su entorno.
Las prospecciones arqueológicas implican un cuidado especial, no solo en su extracción sino en la identificación y observación del estado de los elementos encontrados. Los drones permiten realizar la toma de imágenes sobre estos hallazgos sin alterar su estado actual. La generación posterior de modelos 3D escalados, permite medir, nombrar e identificar cada elemento.
